ESTRATEGIAS DE ADHERENCIA

PLATICAS Y ELABORACION DE MATERIAL DIDACTICO




 ADHERENCIA AL TRATAMIENTO

 La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la adherencia al tratamiento como el cumplimiento de este; es decir, tomar la medicación de acuerdo con la dosificación del programa prescrito; y la persistencia, tomar la medicación a lo largo del tiempo. En los países desarrollados, sólo el 50% de los pacientes crónicos cumplen con su tratamiento; cifras que inclusive se incrementan al referirnos a determinadas patologías con una alta incidencia. La adherencia al tratamiento se ha situado como un problema de salud pública y, como subraya la OMS, las intervenciones para eliminar las barreras a la adherencia terapéutica deben convertirse en un componente central de los esfuerzos para mejorar la salud de la población y para lo cual se precisa un enfoque multidisciplinar. Los medicamentos son uno de los principales recursos terapéuticos para cuidar la salud. Sin embargo, sus beneficios pueden verse alterados por la falta de cumplimiento. Según los datos aportados por el doctor Javier Soto, del Departamento de Farmacoeconomia de Pfizer, “la mala adherencia es responsable de entre el 5 y 10% de los ingresos hospitalarios, de 2,5 millones de urgencias médicas y 125.000 fallecimientos al año en Estados Unidos”. De hecho, la no adherencia se traduce en un empeoramiento de la enfermedad, en un incremento de la morbi-mortalidad, en la disminución de la calidad de vida y en la necesidad de administrar otros tratamientos, además de aumentar el consumo de recursos sociosanitarios.
 Cuando un paciente acude al sistema sanitario se generan una serie de costes asociados a ese acto médico, derivados de:
 • Coste de adquisición, preparación, administración y monitorización de los medicamentos
 • Coste de hospitalización, visitas consulta externa y/o médico de familia, visita al servicio de urgencia, etc.
 • Coste de consulta intrahospitalaria o entre niveles asistenciales.
 • Pruebas complementarias efectuadas y analíticas realizadas.
 • Cirugía y otros procedimientos (diálisis, trasplante, etc.)
 • Coste de tratamiento recaídas/recidivas Estos costes se incrementan de forma exponencial en el momento en que no se cumple el tratamiento.

 BRRERAS

 De acuerdo con dos reconocidos epidemiólogos Haynes y Scakett, un tercio de los pacientes toma la medicación como se le ha prescrito, otro tercio lo hace ocasionalmente o de forma incorrecta y, por último, otro tercio no lo toma nunca. Son muchas las causas que influyen en la falta de adherencia.

Según señaló la doctora Ana Pastor, vicepresidenta de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), las causas principales de la no adherencia son:
 • Problemas con el régimen prescrito (efectos adversos)
 • Instrucciones insuficientes • Fallo en la relación médico-paciente.
 • Desacuerdo del paciente respecto al tratamiento.
 • Mala memoria. Los tratamientos deben ajustarse a las necesidades del paciente, a su vida diaria y tener un balance riesgo-beneficio adecuado. Se debe facilitar información sobre los posibles efectos adversos y la relevancia de estos, sobre las interacciones y proporcionar información verbal y escrita precisa respecto a la prescripción.
 Para mejorar las tasas de cumplimiento hay que transmitir de forma adecuada y comprensible para el paciente la información sobre la enfermedad y su gravedad, el objetivo del tratamiento que tiene que seguir, la dosis exacta, frecuencia de administración y la duración de la terapia. Otro de los factores claves es la comunicación entre médico-paciente. los profesionales sanitarios defienden que informar adecuadamente al paciente y tener una buena comunicación puede evitar muchos problemas. Es fundamental tener una buena relación médico-paciente, a través de la cual se cuente al paciente todo lo que precisa.
Si a una persona se le explica el por qué y para qué se le receta un medicamento, comprenderá y aceptará de mejor grado las decisiones que se tomen. Una adecuada comunicación repercute en una mayor adhesión terapéutica, en una reducción de las prescripciones, en mejores resultados clínicos y en una disminución de las demandas contra los profesionales. La prioridad debe estar en la comunicación y en la buena relación médico-paciente. De hecho, la comunicación se ha incluido en los planes de estudio de Medicina y en el programa docente de la mayoría de las especialidades médicas. “En atención primaria es esencial -destacó la doctora Pastor- ya que al disponer de menos tecnología y ser el primer contacto del paciente con el sistema sanitario, manejamos la comunicación como una herramienta más, que ayuda tanto al diagnóstico como al tratamiento y el seguimiento”. Para Ana Pastor, las bases del cumplimiento se centran, entre otros aspectos, en:
 • Dar a conocer las consideraciones sobre el proceso
 • Hacer sugerencias mejor que prescripciones
 • Facilitar que los pacientes expresen sus ideas y opiniones (preocupaciones, creencias y presunciones)
• Buscar el acuerdo
 • Ofrecer alternativas
 • Comprobar que el paciente está de acuerdo.


 MEDIDAS OPORTUNAS Cada 8 horas De acuerdo con los estudios realizados, el 39% de los errores se deben a olvidos. Así, en los pacientes que no tienen bien definido el horario de la toma, existe un 80% de probabilidades que se le olvide. Además, los pacientes se pueden equivocar sobre todo si tienen que ingerir dos o tres medicamentos diferentes.
El tercer problema más frecuente es la repetición de dosis que se produce en las personas que olvidan y confunden la hora a la que deben ingerir el tratamiento.

 BOTIQUIN CASERO Los botiquines son el almacén de los medicamentos que propician el uso indiscriminado de los mismos por parte de las personas en las cuales no están indicados, lo que se traduce en un mayor riesgo para el enfermo.

 MATERIAL DIDACTICO 1. Presentación 2. Folletos 3. Carteles 4. Ejemplificación y participación.

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